Agroenología
Elaborar un gran vino tiene poco secreto: imaginarlo, diseñarlo, y visualizar qué uva y qué madurez necesitas para alcanzarlo.
Y así, cultivar esa uva y no otra, con los niveles adecuados de acidez, pH, ácido málico, GAP, NFA, glutation, precursores y por supuesto de rendimiento.
En 25 años recorriendo bodegas hemos aprendido que todo lo que la uva traiga de serie es más intenso, más definido, más estable y te ahorra costosos extras en bodega.
De la misma forma que nutres una fermentación en función de sus necesidades, para mantener un suelo vivo y una cepa activa te proponemos nutrir tu viñedo en función de la uva que le pides, en calidad y cantidad.
Midiendo periódicamente el estado nutricional de suelo y planta, y contrastando con los datos de vinificación, podrás comprender el funcionamiento del viñedo y elaborar un PNS (plan de nutrición y estimulación) adecuado para cada parcela que responda a tus objetivos:
- Perfil de vino definido, ergo perfil de uva requerido.
- Rentabilidad cualitativa, equilibrio calidad/producción.
- Sostenibilidad de la plantación en el futuro.
- Responsabilidad ambiental.
Suelo vivo
El suelo es el activo base del concepto vino y de tu negocio.
Para sostener y alimentar las cepas el suelo actúa como una fábrica de reciclaje donde es necesario mantener un equilibrio operativo para que funcione.
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Cepa activa
La cepa es ese organismo casi divino que se encarga de transformar sol, suelo y agua en vino.
Es de recibo dotarla de las herramientas necesarias para culminar el trabajo que le pides: esa uva que quieres para tu vino y no otra.
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Smartfeed Viñedo
El ciclo nutricional del viñedo se entiende contemplándolo a 3 años vista:
El agostamiento del primer año condiciona directamente la vegetación, producción y agostamiento del segundo, y éste la producción del tercero.
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